viernes, 3 de enero de 2014

EL MIOPE ALEMÁN

Es difícil exagerar la importancia de la Unión Bancaria. Eliminar la fragmentación financiera, romper el vínculo letal¨entre riesgos soberanos y bancarios evitando la zombificación de la Eurozona son objetivos demasiado importantes como para ignorarlos.

Por eso, la propia existencia del acuerdo alcanzado para el lanzamiento de sus dos primeros pilares, el supervisor bancario único y el marco de resolución de entidades financieras, puede y debe ser saludada favorablemente. Expresa una voluntad explícita en avanzar hacia una genuina Unión Europea aunque haya decaído el tercer pilar, un fondo de garantía de depósitos común a toda la eurozona.Supone, o, mejor, podría suponer la mayor cesión de soberanía registrada desde la creación del Euro. Si se cumplieran sus objetivos, los bancos ya no solo serían internacionales en vida, sino que, bajo una misma normativa, unos mismos mecanismos de supervisión y resolución, dejarían de ser nacionales en la muerte-liquidación.

Sin embargo, el acuerdo alcanzado resulta decepcionante: el supervisor único no cubrirá a todos los bancos dejando de lado los bancos de tamaño mediano de algunos países, olvidando la experiencia española en la que ha sido este segmento el que mayores problemas ha originado dentro del sistema financiero español. Pero las mayores debilidades del acuerdo alcanzado para poner en marcha la Unión Bancaria están en el Mecanismo Único de Resolución. El mecanismo aprobado es extremadamente complejo y burocrático deja un margen discrecional excesivo a los supervisores nacionales, está dotado de un fondo de resolución escaso y demasiado alejado en el tiempo (2026) y, sobre todo, no está respaldado por un dique de contención (backstop) fiscal apropiado.

La ausencia de un mecanismo de respaldo fiscal tiene graves implicaciones: puede poner en duda la independencia del BCE ante el riesgo de crisis sistémica agudizando los conflictos de interés entre los objetivos de política monetaria y los de estabilidad financiera. La dimensión alcanzada, 55 bn€ en 2026 resulta claramente insuficiente frente a los balances de los bancos, como lo demuestran las cifras movilizadas hasta ahora para los rescates bancarios. Una Unión bancaria débil y retrasada en el tiempo no rompe el vínculo entre riesgos soberanos y financieros. En el fondo, Europa ha apostado por mantener el statu quo bancario nacional sin dar un salto federal en la resolución de entidades en crisis.

El resultado del acuerdo parece confirmar el triunfo de las tesis alemanas:(carta de Wolfgang Schauble marcando las líneas rojas) no se utilizará el ESM como mecanismo de recapitalización directa de las entidades, no habrá mutualización de las deudas bancarias heredadas ('legacy assets'), el fondo europeo de resolución solo será operativo cuando esté completamente financiado; mientras tanto, compartimentos nacionales; por otro lado, el principio de proporcionalidad en el Consejo de Resolución en base al capital del BCE garantiza a Alemania y los países del Norte la capacidad de veto sobre las decisiones de resolución-liquidación. Si a ello se añade la proliferación de comités y personas implicadas en los procesos de decisión, no es difícil concluir que el mecanismo no funcionará con la agilidad que exigen los mercados.
En el fondo, el mecanismo de rescate y resolución bancaria aprobada es el aplicado en España con un toque chipriota: primero, accionistas, después, acreedores preferentes y junior, determinados depositantes de más de 100000 € (como en Chipre) más tarde, fondos nacionales, y, por último, y con una fuerte condicionalidad, fondos europeos, al estilo MoU español.

El acuerdo adoptado ha sido calificado como de farsa, decepcionante, fallido, por los principales analistas europeos. Pone de manifiesto los recelos que suscita un salto adelante en la Unión Monetaria entre los acreedores del Norte ('fatiga de los rescates') que implique cierta mutualización de las deudas, y supone una visión miope del futuro del sector financiero europeo. Porque la paradoja es que cabe la probabilidad de que la próxima crisis bancaria, tras la asunción por el BCE de la Supervisión Única, tenga lugar en Alemania, donde los bancos medianos están infracapitalizados.

Selección de documentos sobre Unión Bancaria (formato html)
Enlace al módulo UB de netvibes



2.1.14

domingo, 13 de octubre de 2013

SARRIKO 2013


Mensaje central: La consecución de la estabilidad financiera constituye el legado central de la crisis. Para alcanzarla, se ha puesto en marcha una nueva regulación financiera internacional /Basilea III-CRDIV) y una nueva arquitectura institucional de la que los Comités de control del riesgo sistémico, la supervisión macroprudencial y la Unión Bancaria Europea son sus mayores exponentes,

viernes, 19 de julio de 2013

Hamlet en Bruselas


La situación europea actual recuerda el dilema hamletiano de ‘ser o no ser’, cuando Shakespeare pone voz a los miedos, las dudas y las incertidumbres del hombre frente al destino, las mismas que Europa tiene frente a su futuro: ‘morir, dormir, tal vez soñar,....’
Lecciones y consecuencias de la mayor crisis de nuestra historia: Documento

Transparencias de Presentación 

sábado, 18 de mayo de 2013

La vida sexual de los elefantes (prospectiva 2030)

futuro 2030

No es frecuente un análisis de largo plazo. Si, además, se realiza en medio de la crisis más grave y compleja después de la II Guerra Mundial, el ejercicio de prospectiva, además de inédito, resulta heroico.

El documento Escenarios de futuro para la economía española 2030 (1) presenta 4 escenarios alternativos, todos posibles, todos viables, aunque con distintas probabilidades de materializarse, mayor en los casos intermedios (escenarios B, follower, y C, economía exportadora) que en los extremos (escenarios A, idílico, o D, catastrófico). La clave reside en qué probabilidades tienen los escenarios dibujados o, mejor, cual sería la combinación de los mismos más plausible con sus implicaciones en las políticas económicas y los sistemas sociales del futuro.

En todos ellos, la cuestión de fondo se sitúa en los más altos niveles políticos y tienen que ver con el destino de Europa y de España. Nunca había sido tan verdad que el Estado-nación es demasiado grande para los problemas pequeños y demasiado pequeño para los grandes. Son tan graves y trascendentales las cuestiones planteadas que nada puede darse por hecho, ni siquiera con nítidas probabilidades de imponerse sobre su contrario; lo más seguro es que nada es seguro. En realidad, el futuro no está escrito, se está escribiendo sobre las decisiones que se van tomando en el camino. Es un proceso autoalimentado cuyas bases dependerán de las respuestas que vayan obteniendo dos cuestiones de especial trascendencia:

i) La ruptura del Euro y de la UE ya no son una posibilidad remota, sino que tiene una probabilidad creciente. Además de sus contradicciones internas (abandono del Euro por Grecia o Chipre, posible salida de UK), habría que añadir el hecho de que Europa camina hacia su irrelevancia en el tablero internacional, como consecuencia del ascenso de las economías emergentes.

ii) El Estado de las Autonomías en su configuración actual no es sostenible en medio de esta crisis financiera. La combinación de crisis económica y política en España puede tener efectos institucionales graves.


miércoles, 1 de mayo de 2013

QUE PUEDE HACER EL BCE PARA IMPULSAR EL CREDITO BANCARIO A PYMES

I. Es probable que el BCE baje los tipos de interés en Mayo. La caída de la inflación y las sombrías perspectivas económicas europeas avalarían esta decisión. Pero este recorte de los tipos rectores tiene dos problemas: requeriría situar el tipo de la facilidad de depósitos en terreno negativo, algo que, si bien existen experiencias en algunos países, suscita dudas dentro del propio Banco Central. El segundo problema de la rebaja de tipos es que es improbable que se transmita a la economía real, como consecuencia de la fragmentación de los mercados. El siguiente gráfico (Holanda) lo pone de manifiesto


lending and funding rate changes


Los tipos han caído a mínimos históricos pero los tipos hipotecarios y de préstamos a las empresas apenas han recogido los efectos de la política monetaria expansiva. Los canales de transmisión están rotos por la fragmentación.

II. Flexibilización de colaterales para facilitar el crédito a Pymes rebajando las quitas (haircuts) de los activos bancarios o disminuyendo el importe mínimo para ser considerados elegibles.

III. Implementar un programa similar al Funding for Lending británico que estimule el crédito con financiación barata y rebaja en los requisitos de capital para las nuevas operaciones. Tampoco es probable que se ponga en marcha antes de que el crédito bancario en Inglaterra ofrezca mejores datos que los actuales.

IV. Las propuestas lanzadas por el BCE (BCE: Benoit Couere; Sme Financing) apuntan en dos direcciones: reducir los requisitos de capital para los préstamos inferiores a 1 MM€ y/o crear un mercado de titulización de créditos a Pymes que permita su refinanciación en condiciones por parte del BCE  bien directa o indirectamente (utilizando el BEI o entidades interpuestas).

En cualquier caso, la parálisis del crédito bancario a las empresas pequeñas y medianas obliga a dar una respuesta al principal problema que víncula la economía real y el sistema bancario. Sin embargo, como lo ponen de manifiesto las encuestas del BCE sobre créditos bancarios (BLS) y sobre el acceso a la financiación de las Pymes (SAFE), los factores asociados a las expectativas económicas siguen dominando  el mercado del crédito bancario a pesar de la ligerísima mejora de las condiciones financieras que muestran los últimos datos, sin duda, influidos por el activismo monetario del BCE. Aunque el BCE decida impulsar medidas para facilitar la financiación y trasmitirlas a le economía real, no es esperable una mejoría sustancial  a corto plazo del crédito.

ICO 30.04.13

Crédito (selección ICO reader)

sábado, 9 de febrero de 2013

MITOS SOBRE LA CRISIS: ¿CRISIS IMPORTADA?

¿Quienes son los culpables de esta crisis interminable? ¿Ha sido una crisis importada?

La lectura de la crisis como un fenómeno originado en los mercados USA y trasladado a la economía española es autocomplaciente. Ciertamente, los orígenes de la crisis se pueden situar en el segmento subprime del mercado hipotecario americano  Pero, cinco años después, la profundidad de la recesión y gravedad de la situación de la economía española, mientras otras se empiezan a recuperar, muestran que la  semilla de la crisis ha germinado en tierra fértil  y cuenta con 'raíces profundas'.

Tipos de interés demasiado bajos durante demasiado tiempo alimentaron un crecimiento exacerbado del crédito en el que participaron tanto las empresas como los hogares en una fiesta de consumo e inversión que se acabó traduciendo en una pérdida de competitividad con relación a las economías centrales europeas  . La escasez de ahorro interno hizo que la financiación de esta burbuja se llevara a cabo apelando básicamente al capital exterior. El aumento del endeudamiento privado fue espectacular hasta situar a la economía española como la tercera más endeudada del mundo. Cuando estalla la crisis por una súbita parada (sudden stop) de la inversión exterior, se desata un proceso interno de transferencia de deudas entre los sectores privado y público; de ahí que, a pesar de los límites que establecía la Unión Monetaria sobre el control de las finanzas públicas,  el endeudamiento de las administraciones públicas no sea la causa sino el efecto de la crisis. No ha sido una crisis fiscal sino un proceso de apalancamiento privado favorecido por una política monetaria laxa, un diseño de la construcción monetaria europea equivocado y unas expectativas falsas que provocaron un  aumento del consumo y de la inversión improductiva. Naturalmente, el Sector Público no se pudo sustraer a este comportamiento generalizado comprometiendo gastos no financiables de manera sostenible por unos ingresos que eran producto de la burbuja, y, por lo tanto, efímeros..


Por estas razones, los indicadores que mejor reflejan la crisis real española son los correspondientes al déficit y la deuda externa, que explican mejor la prima de riesgo que los clásicos indicadores de déficit y deuda públicos.  Desde un punto de vista agregado, la reducción del déficit corriente es la noticia que mejor expresa el ajuste de la economía española. Pero las variables stock, por su propia naturaleza, son menos volátiles y más difíciles de cambiar su tendencia. La Posición neta de inversión internacional española, si bien ha dejado de crecer, no ha experimentado todavía una disminución significativa. Su reducción debería ser el resultado del proceso general de desapalancamiento de los agentes. Sin embargo, los últimos datos conocidos confirman que el desendeudamiento que están llevando a cabo los sectores privados, hogares y empresas, está siendo compensado por el aumento de la Deuda Pública, de manera que la deuda total de la economía española no ha parado de aumentar.

presentación gráfica

ICO 27.01.13